Cirugía de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal
La enfermedad inflamatoria intestinal agrupa un conjunto de enfermedades crónicas del intestino delgado y el colon. Las más conocidas son la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Con frecuencia, estas enfermedades se acompañan de alteraciones en otros órganos, como la piel o las articulaciones. La causa de estas enfermedades es desconocida, y en su desarrollo influyen factores genéticos y ambientales.
El tratamiento de estas enfermedades es médico, y la cirugía se reserva para cuando los medicamentos no consiguen controlarlas. Dado que la colitis ulcerosa sólo afecta al colon y al recto, puede curarse si con la cirugía extirpamos por completo estos dos órganos. En el caso de la enfermedad de Crohn, la cirugía no es curativa y se utiliza para tratar las complicaciones, ya que la enfermedad puede afectar a cualquier parte del tubo digestivo y a pesar de que se puede extirpar una parte del intestino enferma, con frecuencia la enfermedad reaparece en otra parte.
Los pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal se benefician especialmente de ser intervenidos por laparoscopia. Con frecuencia se trata de pacientes jóvenes en los que el resultado estético y minimizar la afectación funcional son aspectos primordiales. Además, y sobre todo los pacientes afectos de enfermedad de Crohn, es probable que vayan a precisar varias intervenciones durante su vida, de modo que minimizar la agresión quirúrgica es muy importante.
